A medida de ser cada vez más complejo el resolver los problemas de la guerra, los Estados ven como imperiosa la necesidad de crear colegios, escuelas o academias en donde se dibujen escenarios supuestos, se estudien hechos pasados y actuales, enfrentando a las fuerzas materiales con las intelectuales, desembocando en posibles soluciones, basadas en leyes, principios y fundamentos a los más diversos conflictos.
En nuestro país en el siglo de la vanguardización, siglo XX, se fundan estos establecimientos de la enseñanza en el arte militar, en donde la Academia de Defensa Militar Conjunta, asume el reto de capacitar y perfeccionar a los mandos militares de unidades mayores de las tres ramas de las Fuerzas Armadas.
Los oficiales cursantes asumen el reto de la modernización de sus conocimientos, de la familiarización con las exigencias del Estado, con el compromiso de conocer y juzgar con exactitud las tendencias actuales.
Como Director de la Academia de Defensa, presento el saludo fraterno y el compromiso de lealtad y trabajo desinteresado de quienes formamos parte de este instituto, el de mayor jerarquía en la enseñanza de la ciencia militar del Ecuador.
“UNIDOS EN LA PAZ, INTEGRADOS EN LA DEFENSA”